Titulo: Freedom
Capitulo: 02
Fandom: Super Junior, Miyavi
Parejas: Sichul / Michul
Clasificación: Angst
Advertencia: Si no te gusta el yaoi (Chico x Chico) es mejor que no leas este serial. No copies este fanfic, si deseas compartirlo en otro lugar, pide permiso al autor y coloca los créditos correspondientes.
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Capitulo 2:
- ¿diga?- preguntó Heechul con una voz muy varonil y seria intentando contener sus emociones pues sabía perfectamente quien llamaba- ¿diga?
- Eto...- el sonido de un papel se escuchó del otro lado al parecer tenía escrito ahí lo que debía decir en coreano- ehm... hola... soy Miyavi, ¿me recuerdas? El chico que quiere raptarte...- ante esas escasas palabras mal pronunciadas en coreano el pelirrojo empezó a reír como loco- ehm... gomen ne, no soy bueno para el coreano, le he pedido a mi traductor que escriba lo que tengo que decir para... expresar mi admiración por tu belleza...- Heechul abrió los ojos de par en par, realmente hablaba muy mal el coreano pero le sonaba tan tierno, definitivamente era un príncipe punk encantador- ¿sigues ahí?
- Aquí estoy...- ahora quien hablaba mal su idioma era Heechul, a pesar de solo estar hablando por teléfono estaba rojo de pies a cabeza, con la mirada brillosita y una leve sonrisa muy picara en sus labios.- no sé que decir...- agregó el pelirrojo- no soy uno de esos chicos fáciles... no me confundas ¿si? Es decir, soy un dios, soy hermoso y toda la cosa pero nada de ser fácil eso afecta realmente mi ética laboral, solo soy de los que juega con sus compañeros por favor no creas que algo pasara entre nosotros solo porque me invitas a tu concierto y luego me dices cosas lindas dignas de un príncipe como tu.... ¿estas ahí?
- Ehm... hablaste muy rápido...- dijo sonando muy confundido intento decir algo más en coreano pero no pudo así que simplemente hablo en su lengua materna ante la sorpresa del otro que no comprendía absolutamente nada- demo! Prometo aprender coreano, soy realmente hábil con los kanjis... solo espera Kim HeeChul, yo te voy a robar el corazón en coreano...- colgando el teléfono.
- Eh? ¿por qué hablas en japonés? que irritante... uhm... crema... crema- buscando una crema para humectar sus manos- uhm que me pondré hoy...- caminando de un lado a otro, de rato en rato se detenía pensativo y miraba fijamente el teléfono moría de la curiosidad, quería saber que tanto había balbuceado aquel chico, entonces pensó en buscar ayuda y sin pensarlo más salió corriendo hasta el cuarto de su manager, donde estaban ya los demás Super Junior.
- Hasta que te dignas a aparecer...- dijo muy serio Siwon, Heechul solo tiró su cabello hacia atrás y continuó caminando hacía su manager- ni siquiera te has cambiado
- Ya déjalo así....- dijo Donghae algo amenazante a su amigo, si bien se llevaba de maravilla con Siwon no estaba dispuesto a dejar que lastimen o molesten a su princesa favorita.
- Hyung... necesito ayuda...- dijo Heechul muy preocupado, todos le miraron asustados, era la primera vez que estaba así- no sé que ponerme... ¿no crees que esos trajes que me han traído me hacen ver gordo?- de repente como un baldazo de agua las palabras de la princesa hicieron que todos se miren nerviosos, eso era tan típico de el, ya para que preocuparse.- necesito ayuda... mi cabello, mi piel, mis uñas, ¿acaso no me veo viejo? Quiero verme espectacular.... quiero ser admirado, quiero que me amen....
- Calma Chulis...- dijo Sungmin acercándose a su amigo y apoyándose en su hombro- te ves espectacular y sexy incluso con una pijama~ solo se tu y ya...
- Tienes razón...- sonrió Heechul- en fin... igual manda nuevas ropas.... si?- el manager asintió con la cabeza- uhm y algo más...- miró algo asustado a los demás sabía que su próximo capricho traería muchas preguntas de sus amigos- quiero aprender japonés...- Siwon bajó la cabeza algo serio, de seguro quería aprender por ese tipo del avión. Después de todo a Heechul nunca le interesó aprender otros idiomas, decía que no eran necesarios, pero ese cambio significaba algo y ese algo dolía- es decir yo soy precioso en coreano, pero quiero hablar japonés... alguien me llamo y dijo “blajsneybuniddi”- heechul intentó balbucear algo de lo que había dicho Miyavi- y me he quedado intrigado... quiero saber si me estaba insultando o si me ha pedido que tengamos una cita...
- Parece que has olvidado que vinimos a trabajar... eso es todo no Hyung?- miro Siwon algo molestó a Heechul, el manager asintió con la cabeza aunque en su mirada había mucha confusión y miedo de seguro temía lo que podría ser capaz de hacer un Heechul enojado ante las palabras de Siwon.
- Trabajar... ja!... el burro hablando de orejas... nos vemos hyung voy a darme un baño en cremas... y tu...- pasando por el lado de Siwon- no pretendas que puedes hablarme como a cualquiera.... respétame que soy mayor que tu...- mirando a kibum- a ver si amarras a tu mascota esta algo rabiosa...- caminado fuera de la habitación- aaaah... a la gente si que le gustan las sobras...
- Heechul~~*- Dongie corrió detrás de su amigo, estaba muy pero muy seguro de que iba a llorar mucho.- Chulis... – le sonrió ante la mirada triste del otro- no sé como puedes ser tan hiriente... me asombra lo fuerte que aparentas ser... ¿no crees que te has pasado con Kibum?
- Tu ex novio se lo busco... además yo no he dicho nada malo, solo dije que el ha recogido mis sobras.... para formar un novio... ay si que le has roto el corazón... uhm... ven compartiré contigo mis cremas especiales....- abrazando a su amigo para ocultar sus lagrimas.
Mientras en la habitación del manager Kibum miró algo enojado a Siwon y sin decir más salió de ahí, estaba muy enojado, el siempre se había llevado bien con Heechul y por culpa de Siwon ahora el pelirrojo lo odiaba a muerte y es que todos en Super Junior sabían que lo que es de Heechul es de Heechul y no se toca, pero después de el rompimiento Siwon empezó a comportarse muy cariñoso con los demás hasta que finalmente le robó un besó en el avión. Eso fue demasiado y cuando descubrió que Cinderella los miraba descubrió que todo había sido una actuación. Entró en su habitación y se dejó caer en la cama, tomando una almohada y colocándola sobre su rostro, para el solo existía un chico y por más que solo eran amigos el nunca había dejado de quererlo: DongHae.
En otra parte de Tokio Miyavi caminaba de un lado a otro intentando memorizar la palabras de su nueva profesora de coreano, realmente deseaba que el pelirrojo lo entienda y si eso implicaba el practicar más que de costumbre y dormir menos, entonces lo haría. Tomó un poco de su café y continuó memorizando el vocabulario, escribirlo se le hacía fácil pero hablarlo era otra cosa, algo fuera de este mundo, algo tan complicado. Las horas pasaron y la noche se apodero de aquella ciudad, el chico de los tatuajes aún continuaba memorizando aquel vocabulario, ya se lo sabía de memoria pero necesitaba estar seguro, después de todo tres intensas horas de clase no habían sido suficientes para el, el necesitaba poder ser capaz de declararse. Miró su reloj y se sentó frente a su gran televisor, su departamento lucía muy solitario, como deseaba poder tener a aquel pelirrojo a su lado. Encendió el aparato que tenía en frente y se dedicó a buscar programas de música, en alguno iría a aparecer, hasta que finalmente lo encontró, se recostó y se dedicó a grabar aquella presentación. Era un princesa, era un chico tan sensual y a la vez especial, parecía ser de otro mundo al igual que su complicado idioma.
Continuará...
- ¿diga?- preguntó Heechul con una voz muy varonil y seria intentando contener sus emociones pues sabía perfectamente quien llamaba- ¿diga?
- Eto...- el sonido de un papel se escuchó del otro lado al parecer tenía escrito ahí lo que debía decir en coreano- ehm... hola... soy Miyavi, ¿me recuerdas? El chico que quiere raptarte...- ante esas escasas palabras mal pronunciadas en coreano el pelirrojo empezó a reír como loco- ehm... gomen ne, no soy bueno para el coreano, le he pedido a mi traductor que escriba lo que tengo que decir para... expresar mi admiración por tu belleza...- Heechul abrió los ojos de par en par, realmente hablaba muy mal el coreano pero le sonaba tan tierno, definitivamente era un príncipe punk encantador- ¿sigues ahí?
- Aquí estoy...- ahora quien hablaba mal su idioma era Heechul, a pesar de solo estar hablando por teléfono estaba rojo de pies a cabeza, con la mirada brillosita y una leve sonrisa muy picara en sus labios.- no sé que decir...- agregó el pelirrojo- no soy uno de esos chicos fáciles... no me confundas ¿si? Es decir, soy un dios, soy hermoso y toda la cosa pero nada de ser fácil eso afecta realmente mi ética laboral, solo soy de los que juega con sus compañeros por favor no creas que algo pasara entre nosotros solo porque me invitas a tu concierto y luego me dices cosas lindas dignas de un príncipe como tu.... ¿estas ahí?
- Ehm... hablaste muy rápido...- dijo sonando muy confundido intento decir algo más en coreano pero no pudo así que simplemente hablo en su lengua materna ante la sorpresa del otro que no comprendía absolutamente nada- demo! Prometo aprender coreano, soy realmente hábil con los kanjis... solo espera Kim HeeChul, yo te voy a robar el corazón en coreano...- colgando el teléfono.
- Eh? ¿por qué hablas en japonés? que irritante... uhm... crema... crema- buscando una crema para humectar sus manos- uhm que me pondré hoy...- caminando de un lado a otro, de rato en rato se detenía pensativo y miraba fijamente el teléfono moría de la curiosidad, quería saber que tanto había balbuceado aquel chico, entonces pensó en buscar ayuda y sin pensarlo más salió corriendo hasta el cuarto de su manager, donde estaban ya los demás Super Junior.
- Hasta que te dignas a aparecer...- dijo muy serio Siwon, Heechul solo tiró su cabello hacia atrás y continuó caminando hacía su manager- ni siquiera te has cambiado
- Ya déjalo así....- dijo Donghae algo amenazante a su amigo, si bien se llevaba de maravilla con Siwon no estaba dispuesto a dejar que lastimen o molesten a su princesa favorita.
- Hyung... necesito ayuda...- dijo Heechul muy preocupado, todos le miraron asustados, era la primera vez que estaba así- no sé que ponerme... ¿no crees que esos trajes que me han traído me hacen ver gordo?- de repente como un baldazo de agua las palabras de la princesa hicieron que todos se miren nerviosos, eso era tan típico de el, ya para que preocuparse.- necesito ayuda... mi cabello, mi piel, mis uñas, ¿acaso no me veo viejo? Quiero verme espectacular.... quiero ser admirado, quiero que me amen....
- Calma Chulis...- dijo Sungmin acercándose a su amigo y apoyándose en su hombro- te ves espectacular y sexy incluso con una pijama~ solo se tu y ya...
- Tienes razón...- sonrió Heechul- en fin... igual manda nuevas ropas.... si?- el manager asintió con la cabeza- uhm y algo más...- miró algo asustado a los demás sabía que su próximo capricho traería muchas preguntas de sus amigos- quiero aprender japonés...- Siwon bajó la cabeza algo serio, de seguro quería aprender por ese tipo del avión. Después de todo a Heechul nunca le interesó aprender otros idiomas, decía que no eran necesarios, pero ese cambio significaba algo y ese algo dolía- es decir yo soy precioso en coreano, pero quiero hablar japonés... alguien me llamo y dijo “blajsneybuniddi”- heechul intentó balbucear algo de lo que había dicho Miyavi- y me he quedado intrigado... quiero saber si me estaba insultando o si me ha pedido que tengamos una cita...
- Parece que has olvidado que vinimos a trabajar... eso es todo no Hyung?- miro Siwon algo molestó a Heechul, el manager asintió con la cabeza aunque en su mirada había mucha confusión y miedo de seguro temía lo que podría ser capaz de hacer un Heechul enojado ante las palabras de Siwon.
- Trabajar... ja!... el burro hablando de orejas... nos vemos hyung voy a darme un baño en cremas... y tu...- pasando por el lado de Siwon- no pretendas que puedes hablarme como a cualquiera.... respétame que soy mayor que tu...- mirando a kibum- a ver si amarras a tu mascota esta algo rabiosa...- caminado fuera de la habitación- aaaah... a la gente si que le gustan las sobras...
- Heechul~~*- Dongie corrió detrás de su amigo, estaba muy pero muy seguro de que iba a llorar mucho.- Chulis... – le sonrió ante la mirada triste del otro- no sé como puedes ser tan hiriente... me asombra lo fuerte que aparentas ser... ¿no crees que te has pasado con Kibum?
- Tu ex novio se lo busco... además yo no he dicho nada malo, solo dije que el ha recogido mis sobras.... para formar un novio... ay si que le has roto el corazón... uhm... ven compartiré contigo mis cremas especiales....- abrazando a su amigo para ocultar sus lagrimas.
Mientras en la habitación del manager Kibum miró algo enojado a Siwon y sin decir más salió de ahí, estaba muy enojado, el siempre se había llevado bien con Heechul y por culpa de Siwon ahora el pelirrojo lo odiaba a muerte y es que todos en Super Junior sabían que lo que es de Heechul es de Heechul y no se toca, pero después de el rompimiento Siwon empezó a comportarse muy cariñoso con los demás hasta que finalmente le robó un besó en el avión. Eso fue demasiado y cuando descubrió que Cinderella los miraba descubrió que todo había sido una actuación. Entró en su habitación y se dejó caer en la cama, tomando una almohada y colocándola sobre su rostro, para el solo existía un chico y por más que solo eran amigos el nunca había dejado de quererlo: DongHae.
En otra parte de Tokio Miyavi caminaba de un lado a otro intentando memorizar la palabras de su nueva profesora de coreano, realmente deseaba que el pelirrojo lo entienda y si eso implicaba el practicar más que de costumbre y dormir menos, entonces lo haría. Tomó un poco de su café y continuó memorizando el vocabulario, escribirlo se le hacía fácil pero hablarlo era otra cosa, algo fuera de este mundo, algo tan complicado. Las horas pasaron y la noche se apodero de aquella ciudad, el chico de los tatuajes aún continuaba memorizando aquel vocabulario, ya se lo sabía de memoria pero necesitaba estar seguro, después de todo tres intensas horas de clase no habían sido suficientes para el, el necesitaba poder ser capaz de declararse. Miró su reloj y se sentó frente a su gran televisor, su departamento lucía muy solitario, como deseaba poder tener a aquel pelirrojo a su lado. Encendió el aparato que tenía en frente y se dedicó a buscar programas de música, en alguno iría a aparecer, hasta que finalmente lo encontró, se recostó y se dedicó a grabar aquella presentación. Era un princesa, era un chico tan sensual y a la vez especial, parecía ser de otro mundo al igual que su complicado idioma.
Continuará...
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