28 oct 2009

Fanfic Serial: Chocolove BONUS

Autor: Kainet
Titulo: Chocolate & Love (AKA Chocolove)
Capitulo: BONUS
Fandom: Super Junior, SHINee, TRAX
Parejas: Sichul / Varias
Clasificación: Angst / Au / Lemon / Secuela
Advertencia: LEMON MASIVO. Si no te gusta el yaoi (Chico x Chico) es mejor que no leas este serial. No copies este fanfic, si deseas compartirlo en otro lugar, pide permiso al autor y coloca los créditos correspondientes.

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White Chocolate Lemonade


ESTRELLA ROJA

Todo parecía ser perfecto, el viento suave, el sol templado, las flores brillantes; todo y nada: estaba solo en aquel lugar. Se sentía solo. Tomó entre sus manos un girasol y lo abrazó, deseaba tener cerca a Taemin. Caminó en círculos hasta que la noche se apoderó de su mirada y el frío invadió sus sentidos. Caminó hasta que quedó lejos e internado en alguna parte del sendero a casa. Se dejó caer sobre el pasto suave y ligeramente crecido: estaba agotado, de todo y de nada. Cerró los ojos e intentó despejar sus pensamientos.

De repente sus pensamientos, en los que reinaba Taemin, empezaron a volverse turbios. Si tan solo lo hubiera complacido mejor. Si algo daba vueltas en su cabeza era el no haber sido bueno en la cama, solo eso pudo haber hecho que busque a Jay. Sintió frustración.
"Te equivocas, Minho. Tú eres el mejor amante" Una voz susurró en su oído, no necesito abrir los ojos, sabía quién era. Rápidamente sintió aquellas manos frías introducirse en sus prendas intimas y empezar a acariciar su miembro.

"Taemin" Gimió Minho con los ojos cerrados, lastimando al acompañante de aquella noche. No importaba, después de todo, era alguien pagado. Dejó que el otro se apodere de su parte inferior. Lentamente, mordió sus labios para reprimir sus gemidos al sentir la calidez de la boca de RS. "Red Star" susurró al sentir que el otro se detenía. "Te quiero en mi interior" se puso caprichoso el acompañante. "Te pago por mi placer, no por el tuyo... sigue lo que empezaste." ordenó Minho sin siquiera abrir los ojos. RS le miró enojado, pero no le quedó de otra que seguir introduciendo aquella intimidad de su cliente. No quería hacer enojar a Minho, no podía. Poco a poco la respiración de Minho empezó a agitarse, con cada movimiento del otro. Sentía placer, pero estaba vacío. Extrañaba a Taemin, lo extrañaba demasiado.

De repente, Minho detuvo a RS y cambió posiciones: al otro le encantaba lo rudo. El menor tiró contra el piso al pagado y lo abrió de piernas para luego empezar a penetrarlo sin previa preparación. Los gritos de RS se escucharon por todo el lugar, no obstante, estaban totalmente solos en la casa de campo de los Choi. "Me gustas así" chilló RS, Minho no contestó, simplemente continuó con los ojos cerrados, pensando en Taemin, mientras calmaba su cuerpo.
"Taemin" repitió Minho antes de terminar aquel acto, vacío. "Taemin" volvió a decir, llenando de odio al otro, de celos, quizás. Minho se arqueó un poco antes de terminar mientras el otro gritaba descontroladamente, en pocos minutos, ambos cayeron exhaustos sobre el pasto corto.
"Quiero a alguien diferente para la próxima semana, le dices eso a tu jefe" dijo Minho, una vez que su respiración se tranquilizó. "Ha llegado un nuevo, dicen que es insaciable..." contestó RS. "Escapó de su casa, hasta donde sé..." agregó. Minho sintió ganas de conocer a aquel chico nuevo, por alguna razón sintió que se trataba de Taemin. "¿Su nombre" preguntó empezando a vestirse. "Black Rose" susurró RS mientras imitaba al otro y se colocaba, con dificultad la ropa "Hoy me desgarraste... te cobrarán por eso" rió cínico. "No me importa el dinero, me sobra... como para desgarrarte toda la noche" El menor fue osco, quizás déspota. "Entonces hazlo..." RS saltó sobre el cuello del menor y empezó a acariciarlo y besarlo para motivarlo a seguir en su acto sexual. Minho no se negó, y continuó el juego del mayor.


CENA

Era incómodo, bastante, pero ahí estaban los tres. Heechul demostró toda su etiqueta y elegancia al comer, mientras evitaba tener contacto visual con su suegro; aquel hombre mayor lo miraba muy mal. Siwon, por su parte, miraba nervioso la tensa situación; sonreía a su padre y le invitaba a probar los platillos. El hombre mayor los analizaba en silencio, ciertamente Heechul parecía una chica, más ahora con el cabello largo. “Debería cortarse el cabello, confunde a las personas” comentó ácidamente el padre del menor. “Se ve bien así, le gusta estar así” defendió a su novio. Heechul se mantuvo en silencio, sabía que si abría la boca no pararía y sería una pelea a muerte con aquel hombre de tradición. Sonrió de lado mientras bajaba, disimuladamente su mano izquierda hacia la pierna de Siwon, lo acarició lentamente; buscando tocar zonas prohibidas por la etiqueta de aquel lugar. El menor lo miró asustado, esa mano empezaba a deslizarse entre sus piernas, pero Heechul comía tranquilo sin mirar a Siwon, como si nada estuviera ocurriendo debajo del mantel. “Esta rico… el guiso” intentó controlar su voz al sentir que Heechul bajaba el cierre de su pantalón. “¿No padre? El guiso… está rico” sonrió nervioso, mientras una gota de sudor resbalaba desde su frente: la mano de Heechul empezaba a generar caricias peligrosas. “Yo creo que está muy caliente…” comentó Heechul sin despegar la mirada de su plato, dejando notar su sonrisa maliciosa, obviamente no hablaba de la comida. Siwon le agradeció a su Dios el haber ido con un saco largo a aquella cena, de lo contrario todos notarían su estado cuando se parara para salir del fino restaurante. “Algo dura la carne…” se quejó el hombre mayor mirando a Heechul. Las manos de la princesa acariciaban de tal manera esa parte de Siwon que este ya casi no podía reprimir sus emociones. “Ahhh” gimió, haciendo que su padre lo mire mal. “Lo siento, me mordí la lengua…” mintió intentando controlar el calor en su cuerpo, el rojo intenso en sus mejillas. “Pareces afiebrado… anda a lavarte la cara” Ordenó el hombre viejo. Heechul mantuvo la sonrisa, procurando no soltar su juguete. Era divertido pensar en que ese viejo mezquino desconocía todo lo que sucedía debajo de la mesa. “Uy… se me cayó el lente de contacto” Heechul se metió debajo de la mesa ante la mirada de reproche del padre del menor. “Es que es… muy… ciego…” pudo atinar a decir Siwon. Casi grita al sentir el calor de la boca de Heechul en su miembro. El padre de este, vio a unas mesas a una familia conocida y se levantó de la mesa para ir a saludarlos. “Heechul…” susurró Siwon al sentir los movimientos de su novio debajo de la mesa. “Aquí no…” La princesa detuvo su labor. Salió debajo de la mesa y acomodó su cabello. “Iré al baño…” le susurró al ver que su suegro se acercaba. Lamió sus labios coqueto y se fue al baño.

Siwon vio cerca a su padre y fingió tener una llamada importante, le hizo señas de que contestaría en el living ya que para el viejo era de mala educación hablar en la mesa. Desvió su camino y se metió en el baño, encontró a Heechul sentado en el lavamanos y truncó la puerta para estar tranquilos. “Travieso…” caminó con dificultad. “¿No hay nadie?” Heechul negó con la cabeza. Siwon se abalanzó sobre Heechul y empezó a besar sus labios apasionadamente. “Tenemos aproximadamente seis minutos…” rió Heechul. Siwon lo alzó y, prácticamente, le arrancó el traje para continuar lo que habían empezado debajo de la mesa. “Te divierte que mi padre este cerca y que no sospeche ¿No?” rió Siwon. Heechul no dijo más y abrió el pantalón de Siwon para seguir con su trabajo ahí. El más alto se apoyó en la pared para contener los espasmos de placer que hacían temblar su cuerpo al sentir tantas sensaciones. Antes de conocer a Heechul, definitivamente, no sabía lo que era vivir al límite. Solo respiraba regido por etiquetas e hipocresía. “Entra…” Se apartó Heechul para luego abrirse de piernas y esperar a su novio. Siwon sonrió perverso y entró rápidamente, procurando atrapar los labios de Heechul para ahogar su grito. Era cierto, ya varias veces, la escandalosa voz de Heechul los había metido en problemas. No era la primera vez que lo hacían en un lugar público, después de todo, ya lo habían hecho varias veces en la casa de los padres de Siwon, en la oficina y en el elevador. “Eres un travieso, un perverso…” Susurró Siwon al separarse en medio beso. Heechul mordió sus labios, reprimiendo sus gemidos. A los pocos minutos ambos llegaron a su límite y cayeron rendidos. “Te amo” rió Heechul. “Niño estirado que me hace cosas indecentes…” Siwon le miró divertido. Ambos se besaron lentamente para luego empezar a vestirse cuando, de repente, uno de los cubículos del baño se abrió y apareció Yunho. Empezó a aplaudir con una enorme sonrisa en los labios. “Sí que somos muy calientes… con razón ibas a diario al Gimnasio” rió irónico. Siwon intentó acercarse amenazante pero Heechul lo tomó del brazo. “Pobre, seguro que nadie quiere acostarse contigo, por eso espías a los demás… iluso voyerista.” Defendió la princesa. La pareja se acomodó la ropa rápidamente y se empezaron a arreglar para salir al comedor del restaurante. Yunho mantuvo su sonrisa pervertida y empezó a aplaudir “No me molestaría ser voyerista exclusivo de ustedes dos” sonrió de lado. Siwon no se contuvo más y se abalanzó a tirarle un puñetazo. “Siwon, basta…” Heechul lo detuvo y lo jaló fuera del baño. “Sabes que odio la violencia” renegó. El más alto se acercó y le besó cerca al oído. “Estuviste esplendido hoy, amor… ve primero y luego finjo venir del living…” El mayor se calmó un poco y obedeció a Siwon. Caminó rápido donde su suegro y se sentó. “Lo siento, había mucha gente en el baño” el hombre mayor no le contestó, siguió comiendo su comida. “¿Siwon?” fingió desconocer el paradero de su novio. “Fue a contestar algo de la empresa…” dijo lacónicamente.
A los minutos llegó Siwon y se sentó a comer, la cena continuó serena, llena de desplantes del padre de Siwon; no obstante, nada borraba aquella sonrisa pícara de los labios de Heechul. A las horas se despidieron del hombre mayor y continuaron paseando por la ciudad. Ninguno volvió a mencionar el episodio con Yunho. Quizás porque ambos se sentían incómodos al respecto. Quizás porque ese pequeño detalle malograba su aventura en el baño de uno de los más caros restaurantes de Corea del Sur.


JUGUETE

-China es muy grande, hay tanta gente- rió Sungmin mientras caminaba feliz con Kyu. Al ir tomados de la mano hacía que todos volteen a mirarlos, después de todo ser abiertamente homosexuales era algo muy juzgado por la sociedad. Pero a ninguno le importaba eso. Sungmin de rato en rato besaba la mejilla de Kyu y jugaba con sus manos. Algunas chicas se detenían a tomarles fotos y cosas por el estilo. Eran el sueño yaoi de muchas chinas en aquel lugar.- Amor…- Kyu volteó a mirar a Sungmin.- ¿Esa tienda de qué es?- señaló una tienda con focos rojos.- Sabes que no entiendo chino…- se excusó.
-Es una tienda de juguetes…- Kyu vio que los ojos de Sungmin brillaron, quizás había cometido un gravísimo error al decir la palabra juguete.- Pero no son juguetes normales- jaló de su mano ya que el conejo rosa empezaba a caminar directamente hacia esa tienda- Sungmin no…
-Pero quiero ver si hay cosas rosas…- hizo puchero- Di que sí… no tengo muchos juguetes, sabes que cincuenta conejos rosas son muy poco para alguien como yo- estaba por empezar a llorar cuando Kyu lo jaló hacia el y besó sus labios.
-Ahí no hay juguetes para un niño lindo como tú…- le susurró.
-¿Por qué?- cuestionó caprichoso el mayor
-Porque ahí venden juguetes sexuales…- Kyu se sonrojó y Sungmin también, pero luego apareció una enorme sonrisa en sus labios.
-Quiero ir a ver…- confesó Sungmin con una mirada muy pervertida- Solo un ratito. No compraré nada…

Kyu no pudo negarse así que se dejó jalar por su novio hasta el establecimiento. Una vez dentro el rostro de Sungmin se tornó rojísimo al ver semejantes cosas en el lugar. Pero sus ojos traviesos se posaron en todo, absolutamente todo lo que era color rosa. Rió pervertido al tomar entre sus manos unas esposas y mostrárselas a Kyu. "Son lindas" sonrió cual niño. El dueño del establecimiento sonrió al observar a la pareja y Kyu se puso algo incómodo. Quizás inseguro.
Pasó una hora, pasó una larga hora, no obstante ya estaban en casa. Sungmin sonrió feliz al ver sus nuevos juguetes. Kyu se cruzó de brazos mientras se apoyaba en la puerta de la cocina indicando que tenía hambre. Pero Sungmin no quería comer en absoluto. Se acercó coqueto al más alto y lo abrazó tiernamente. Minutos después Kyu estaba atrapado por las esposas rosadas, con la camisa abierta y con un Sungmin travieso sobre él. "Me pregunto cómo sabrás con crema de pastel" rió Sungmin echándole el dulce sobre el pecho desnudo del otro. "Hoy serás mi snack de media noche" Una sonrisa enorme apareció en los labios del menor.



ALCOHOL

Le dolía el corazón, le dolía mucho. Estaba solo, totalmente solo en aquella oscura y fría noche. Cerró los ojos para pretender que no notaba sus lágrimas pero era casi imposible. Henry suspiró lentamente, esperando que la noche se vuelva más y más fría. Deseaba morir. Pero, la luz de una de las lámparas de aquel parque se vio opacada por una sombra. Henry abrió los ojos llorosos para encontrarse con Hangeng. “¿Qué haces aquí?” preguntó el mayor. Henry lo miró mal: estaba ebrio y apenas podía mantenerse en pie. “¿Por qué tomas?” reprochó el menor. “Porque no puedo olvidarte…” contestó dejándose caer, producto de su estado etílico. “Superar que no eres amado por la persona que amas es algo muy difícil…” agregó agarrándose la cabeza con frustración. Henry empezó a llorar. Ya estaba al tanto de los problemas de alcohol de Hangeng, pero no sabía cómo ayudarlo. “Siento que si me acerco te voy a dañar más…” se excusó Henry. “Preferiría morir a sentir esto…” Hangeng empezó a llorar. “Olvídalo, olvídalo…” se levantó con un equilibrio precario. Entonces empezó a alejarse, no quería seguir estando en ese lugar, no con un Henry que no lo quería más. Pero el menor se preocupó y empezó a seguirlo. “No me sigas… déjame, déjame como lo hiciste en Canadá” volteó enfurecido el ebrio chino. Henry bajó la cabeza, el licor sacaba palabras hirientes de Hangeng, no obstante, ciertas. Lo siguió hasta que ninguno supo dónde estaban, estaba desierta la calle, y solo estaba abierto un hospedaje. Henry tomó del brazo a Hangeng y empezó a guiarlo hasta aquel lugar. “Necesitas dormir” secó sus lágrimas. “No llores… ella se pondrá triste si lo haces…” el chino señaló el cielo, indicándole que hablaba de su abuela.

Henry cayó sobre la cama, indefenso, adolorido, nervioso; Hangeng, encima. Sus labios se desesperaron por sentir aquellos besos que ambos extrañaban de a más no poder. Ambos exploraron sus bocas y jugaron a pretender que todo era producto del licor. Hangeng se excusó en que su cuerpo reaccionaba solo; Henry, en que no podía decir que no.
-Te amo, nunca dejaré de hacerlo…- susurró Hangeng mientras entraba delicadamente en su pequeño. Henry mordió sus labios mientras se aferraba a la espalda del mayor.
-Perdóname Hangeng…- dijo débilmente cuando el otro empezó a moverse en su interior- Perdóname, yo no merezco tú amor.- articuló cuando la voz se le quebró por completo. Ninguno dijo más, siguieron en aquellos actos sin más palabras; se dejaron llevar, quizás para recuperar el tiempo perdido. Quizás para perdonarse a sí mismos y el uno al otro.



TELÉFONO

"Ahí Kibum..." lamió sus labios con desesperación, imaginando que su novio lo besaba con frenesí. Con una mano sostenía el celular y con la otra se estimulaba de alguna manera para sentir lo que imaginaba. Los gemidos del otro lado del teléfono lo excitaban: escuchar placer en la voz de Kibum lo volvía loco. "Donghae..." susurró el cachetón con el rostro totalmente rojo, con los ojos cerrados y su mano ocupada dentro de su pantalón. Se extrañaban y era la única manera de sentirse cerca. La única manera de tenerse. No pasaba ni un mes y ya sentía que se volvían muertos vivientes al no tener al otro. "Ahhh Kibum" gimió Donghae al sentir que terminaba su acto sexual a distancia. Kibum, por su lado solo se dejó caer cansado sobre su sofá. El sexo telefónico no era algo que le llamara la atención. Además estaba algo enojado por la noticia que había recibido días atrás. Llamó para hablar sobre eso y se encontró con un Donghae deseoso de hacer de todo menos hablar. "Has estado frío amor ¿Sucede algo?" preguntó Donghae mientras limpiaba la superficie de su piel, para luego empezar a colocarse la ropa. "Quiero hablar y tú..." se detuvo Kibum, fue un largo silencio que alarmó mucho al pez. "Hablemos entonces." agregó Donghae con una sonrisa pícara en los labios. "¿Por qué no me has dicho que Hisae está en USA desde hace dos semanas?" fue directo, no quería rodeos ni juegos, solo quería saber el porqué del silencio del otro. Quería que sus celos se controlen de una buena vez. "¿Eh? ¿No te dije? No es algo importante en sí..." respondió Donghae. Kibum se enojó muchísimo ¿No era importante? Para él sí lo era. Kibum, una persona difícil de expresar lo que sentía, difícil de confiar en otros. Confiaba mucho en Donghae, le contaba absolutamente todo; no obstante al parecer su novio seleccionaba la información para él. Determinaba que era importante de contar y que no. No dijo nada tras un prolongado silencio: simplemente cortó la comunicación. Donghae volvió a llamar, insistió durante horas pero el menor apagó el celular y desconectó el teléfono.
No quería hablar, estaba enojado, decepcionado y celoso. Celoso de que Hisae trabaje con Donghae en ese musical, celoso de saber que ella sería la protagonista. Celoso de haber leído que tendrían que darse un beso. ¿No importante? A quién engañaba, eso era de suma importancia. Caminó en círculos a lo largo de su departamento. Cogió el marco en el que tenía la foto de Donghae y la tiró contra la gran puerta de cristal que daba a la terraza. En menos de un minuto todo estaba roto en mil pedazos. Caminó descuidado e intentó recoger los vidrios pero torpemente terminó lastimándose una de las manos. No dolía, cualquier dolor era insignificante comparado con el dolor de su corazón. Sonrió de lado y caminó hasta el baño donde curó, desinteresadamente, la herida. "Eres un idiota... Lee Donghae" susurró mientras volvía a la sala.



CASTIGO

Wook sonrió de lado al ver a Yesung en su puerta, estaba algo tomado pero no importaba, estaba ahí. El más alto no dejó hablar al otro y entró repentinamente para acorralarlo contra la puerta y empezar a besar sus labios desenfrenadamente. Bajó sus manos hacia el pijama del más pequeño y empezó a manipular su sexo para estimularlo. Lentamente movió su mano generando círculos en aquella zona para prolongar un poco el placer y cuando ya sintió que Wookie estaba preparado, se detuvo en seco y caminó hasta la entrada. "Este será tu castigo" susurró Yesung antes de salir del departamento. Wookie lo odió, con todo su ser. Estando así, dejándolo así, pero no importaba. Después de todo, eso implicaba que poco a poco Yesung iba cediendo. Aún lo amaba, de eso estaba muy seguro. Sonrió de lado y miró su pantalón. "Otra noche aburrida, pensando en él..." su mirada se volvió perversa y caminó como pudo hasta el sofá donde trataría de calmar su cuerpo; el cual hervía.



TRABAJO

-Eres un jovencito muy apasionado ¿Quién te enseñó a ser tan bueno en la cama? - le preguntó aquel hombre al salir de su interior. Taemin se giró un poco para dejar ver su rostro, su sonrisa y sus ojos perdidos.
-No lo sé... aprendí solo. ¿Me pedirás la próxima vez?- rió cínico.
-Claro... me ha gustado tu... servicio. Black Rose. Nunca olvidaré ese nombre- Se colocó la ropa y salió de aquella habitación de hotel. El menor se metió al baño y empezó a ducharse. Tenía otro cliente programado para la siguiente hora. Según le dijeron era alguien joven. Se emocionó esperando que sea alguien bonito. Se echó algo de perfume y salió en bata a la habitación para esperar a su cliente. Entonces se abrió la puerta y lo vio. Los ojos de Taemin se abrieron de par en par al ver a quien tenía en frente.

2 comentarios:

  1. ooooooooooook no me retes, acá comento~


    minho! LPM!!!! como se te ocurre contratar a alguien en lugar de taemin?! dios ke chico ¬¬ tendría ke ir a buscarlo!

    ja!! en laultima parte, sabía ke era taemiiiiiiiiiiiiiiiiiin! sabía sabiá sbía sabía!! *O* minho lo encontro a ke si? a ke el entra ahí!!!!!!!!!!!! *sale corriendo*


    el sichul , je me imagine la sonrisa de rella ~
    ke par de pervertidos haciéndolo en cualquier lado
    sabes? me esta cayendo cada vez peor yunho xD a ver cuando se encuentra un jae x ahi =o= xD

    el kyumin no lo comento


    kyaaaaaa hanhae *la asfixia en un abarazo* es ke henry me hizo llorar tanto ;o; la proxima acompañaba yo al chino a beber T^T yaaaaaaaaaaaay estan juntos ~~ yo se ke siii ke se perdonaran lalalalaa~~



    kihae,, hm,, hae,,,~~ Bummie debería tratar de ir a usa a controlar a la puta esa ! ke lo ke falta! que toque a hae! i el fishi es un dormido! comon o le va a contar? estoi a favor de kibum! *noporqueseamisujufavorito* jaja


    yesung, muy buena idea! pero ánimo wookie~~ lo estas ganando de nuevo =D



    estuvo bueno el bonus~

    (feliz? comente~)

    wi~~

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  2. Kya~~~
    Morí... o sea, no puede amar más el bono, me encantaron los escuentros retorcidamente reconciliadores, o sea Minho, como tan puto, rescata a Taemin que anda de perdido por ahí, aunque que creo que ahora se lo lleva si o si xD, Rella~~~ maldición me muero de celos, me lo pude imaginar todo pervertido con Siwon *¬*, Chicos de los dulces, tan tú como siempre xD, HanGeng, mi niño, te amo!!!, y Henry tanto llorar, yo voto que esta bueno, ya se han dañado demasiado es la hora de volver!... Pescado sopenco!!! como no te das cuenta de que la yegua esa te quiere con papas???, Bummie ve a marcar terreno, y dale unos cuantos golpes a esa ****, y Wookie~~~ vamos que se puede, eres el ideal para Yesung XD

    Esop, me encanto, y espero anciosa el siguiente, gracias!!!!

    <3

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Ella quiere saber

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