Autor: Kainet
Capitulos: Bonus
Fandom: NEWS
Parejas: TeoMassu / TegoPi /RyoUchi
Clasificación: Angst / Au
Capitulos: Bonus
Fandom: NEWS
Parejas: TeoMassu / TegoPi /RyoUchi
Clasificación: Angst / Au
Proceso: TERMINADO
BONUS
La
noche era fría y una gran fiesta se realizaba en casa de Jin, todos los
invitados tomaban litros de litros de alcohol, Massu no fue y Tegoshi tampoco,
ambos creían que el otro estaría en la fiesta así que trataron de evitar un
encuentro algo incomodo. Uchi había ido de viaje a visitar a sus padres, quienes
ofrecerían una gran cena en su nombre, esta vez Ryo no lo acompaño ya que no se
llevaba muy bien con el padre de Uchi desde que habían decidido formalizarse
como pareja, no por ser gays, sino que el padre de Uchi estaba al tanto de las
veces que Ryo había hecho llorar a su hijo y eso era algo imperdonable. No
comprendía como es que su hijo seguía al lado de ese tipo. La noche se hizo más
fría y a todos empezaban a subírseles el alcohol a la cabeza.
Nishikido
estaba parado al lado de Jin cuando Koki se les acercó para decirle al dueño de
casa que Ueda estaba bastante mal en el baño, al parecer el ron en exceso no le
venía nada bien al chico de cabellos negros. Ryo se echó a reír como loco,
acción que Koki imitó, les contó que el pobre estaba abrazado al inodoro
devolviendo lo poco que había comido. Una carcajada más fuerte fue la que soltó
Kame, quién apareció detrás de Jin, este se puso pálido al ver a su kare
desafiarlo con la mirada como reprochando el que se burle del pobre Ueda, sin
decir palabra alguna se fue en busca de su mejor amigo, además era su trabajo
como líder velar por sus demás compañeros.
Ryo
sonrío algo malicioso, quizás necesitaba divertirse un poco más, le pidió muy
sutilmente a Jin que se lleve a Kame a otro sitio, este le miró desconfiado
pero bueno, debía reconciliarse con su novio ya que se veía bastante enfado
cuando se fue. Rápidamente Jin fue tras Kame y no dejó que este entre en el
baño, lo tomo de la cintura y besando su cuello lentamente le susurro ciertas
cosas en el oído, Kame se sonrojó notablemente ante aquella proposición y sin
pensarlo dos veces, le robo un beso al más alto, apoderándose del labio
inferior de este, lo mordió un poquito como desquitándose por la burla hacia su
mejor amigo. En aquel momento Jin dejo de pensar claramente y se llevó a Kame a
su habitación. El líder de KAT-TUN olvidó por completo a su mejor amigo y se
entregó a los brazos de su novio.
Ryo
caminó lentamente hasta el baño de Jin, con las manos en los bolsillos
pretendiendo no saber que Ueda estaba ahí; entró al baño, el pobre estaba
desmayado al lado del inodoro, Ryo sonrió y lo tomo del brazo y pasándolo por
su cuello se lo llevó hasta su auto, una vez ahí le dijo a Koki que lo llevaría
a su casa, este sonrió confiado y regreso a al fiesta. Una vez en su departamento Ryo echo sobre su
cama al inconsciente Ueda y espero hasta que despierte, este no demoró mucho en
hacerlo, le dolía la cabeza y se sentía como si un trailer hubiera pasado sobre
el, Nishikido corrió a ayudarlo a sentarse en la cama y le ofreció más licor,
el otro aún no reaccionaba bien, así que solo tomo el licor que le dio, minutos
después ya había tomado otra botella de ron.
Lentamente
Ryo fue deshaciéndose de las ropas de Ueda y sin recibir negativa alguna lo
hizo suyo, las pocas horas que separaba aquella madrugada de la mañana pasaron
volando. Ueda despertó, se sentía muy cansado, bastante adolorido y su cabeza
iba a estallar, pensó que de seguro estaba en la habitación de Jin. No, no era
la casa de Jin, era una casa algo ajena a él, es más nunca había estado ahí,
miró asustado a su alrededor y se encontró con Ryo abrazado a su cintura,
sintió terror de tan solo pensar que algo había sucedido, trató de
tranquilizarse, quizás era una broma de mal gusto de ese bastardo. Su rostro
palideció al notar que no tenía ropa y que Ryo tampoco, dio un salto fuera de
la cama y con los ojos muy indignados grito el nombre del que aún dormía,
necesitaba una explicación y la necesitaba ya.
- ¿Qué tanto escándalo haces? Estoy muy cansado déjame dormir…- Ryo
intentó volver a dormir pero Ueda empezó a hacer un escándalo lo empujó de la
cama, estaba como loco, quería explicaciones, por qué estaban desnudos en la
misma cama, que lugar era ese y por qué diablos no recordaba nada.
- ¡Maldita sea!- Ryo se puso agresivo y tomo del cuello a Ueda, este que
estaba muy histérico cacheteó a Ryo y con un largo silencio demostró que no
estaba dispuesto a irse sin que le explique que sucedía ahí. – dormimos juntos
si eso es lo que quieres saber…
- ¿Qué? ¿Estás mal de la cabeza? Yo jamás me acostaría contigo- Ueda
volvió a golpear a Ryo- ¿Me crees estúpido? dime por qué me molestas tanto, es
una de tus bromas, ¿No?- Ryo sonrió maliciosamente y se cruzo de brazos, al
parecer no quería hablar- ¡Habla
desgraciado! ¡Di que es una de tus bromas! ¡DILO!
- No lo es… ¿Jamás te acostarías conmigo? Eso no decías anoche cuando
susurrabas mi nombre…- Ueda no se contuvo más y se lanzó sobre Ryo golpeándolo
una y otra vez, no pararía hasta matarlo, pero la verdad es que Ryo aún no
reaccionaba, el tenía mucha más fuerza, así que en un dos por tres aventó a
Ueda contra la cama y se posicionó sobre él. Con una mano sostuvo los dos
frágiles brazos del que estaba abajo y empezó a besar su cuello. Ueda luchaba
por quitárselo de encima pero era muy fuerte, unas cuantas lagrimas empezaron a
humedecer su fino rostro, le dolía el cuerpo, sentía tanto asco de si mismo,
era cierto: Ryo había pasado la noche con el.
El
sonido de una llaves impactando con el suelo hizo que Ryo se detenga de su afán
por besar los labios de Ueda, este miró asustado hacia la puerta encontrándose
con un Uchi pálido, con los ojos totalmente llenos de lagrimas, había vuelvo de
su viaje lo más rápido posible para estar con su novio y lo primero que ve al
entra a su habitación es a su novio con otro.
“¿Qué es esto Ryo?” dijo con la voz temblorosa, miró a Ueda, lucía
bastante mal como para que eso fuera con su consentimiento, sabía de memoria
que Ueda lo único que sentía por Ryo era asco, sin pensarlo dos veces se
abalanzo sobre Ryo y de un solo empujón liberó a Ueda, este seguía en shock en
la cama, se quería morir, ¿Había tenido relaciones con Ryo? ¿Cómo era eso
posible? Uchi se acercó a él y ante la mirada atónita de Ryo secó las lagrimas
de Ueda, lo tomó de la mano y le colocó su abrigo “Te llevó a casa Ueda” dijo
saliendo con él del departamento.
El
silencio se hizo presente de camino a la casa de Ueda, este solo lloraba en
silencio, como podía mirar a la cara de Uchi si este lo había visto ahí, y de
seguro lo estaba odiando, de repente el auto se detuvo en un semáforo y Uchi le
extendió un pañuelo para que seque sus lagrimas, al parecer no estaba enojado
“Tu no tienes la culpa de nada Ueda… por favor no llores, ¿Si?” dijo sin
despegar la mirada del volante. Ueda le dijo que no recordaba nada, lo único
que recordaba era que Koki lo había visto vomitando en el baño de Jin y que
había ido por ayuda, pero de ahí no recordaba nada, solo el haber despertado al
lado de Ryo, de nuevo las lagrimas volvieron a invadir su rostro, le pidió
perdón a Uchi, pero el había pasado la noche con Ryo. La mirada del que
manejaba se oscureció rápidamente al escuchar la disculpa y le dijo casi
llorando “Tu serías incapaz de estar con Ryo, estoy seguro que el se aprovecho
de tu condición… es un maldito bastardo, pero ¿Por qué lo amo tanto?”
Después
de dejar a Ueda en su casa, decidió volver al departamento de Ryo, donde tenía
que aclarar muchas cosas, cuando entró en la habitación se encontró con Ryo que
estaba con la mirada en blanco, sus ojos lucía llorosos y al parecer no se
había movido de donde lo dejo, Uchi tomo una manta y lo cubrió, un susurro de
Ryo hizo que aquellas lágrimas que había estado tratando de ocultar mojaran la
desnuda piel de Ryo, “lo violé… Uchi lo violé…”
Un
fuerte abrazo rodeo a Ryo y un beso en su frente, después de todo lo amaba más
que a su vida, sin necesidad de que el pida perdón, ya lo había perdonado, pero
¿Hasta cuando podría aguantar? ¿Cuánto su corazón sería capaz de soportar por
ese enfermizo amor que lo estaba matando poco a poco?
“Uchi…
debemos terminar…” dijo Ryo mirando un punto fijo en la pared, el corazón del
otro se desgarró al escuchar aquello, quería morir, pero ¿Por qué? ¿Por qué lo
estaba terminando? Miró a su novio confundido pero este no le devolvió la
mirada, solo se limitó a concentrarse en lo que estaba diciendo “ya no quiero
lastimarte… por favor déjame solo” dijo poniendo fin a su relación.
A
la mañana siguiente Ryo llamó por teléfono a Massu, este no comprendía por qué
lo había llamado pero al parecer tenia algo que decir, se sorprendió mucho
cuando lo llamó en la mañana, pidiendo verlo, pensó que se trataría de trabajo
así que aceptó la invitación. Ryo miró fijamente a su invitado y lo invitó a
pasar a su departamento, Massu examino todo al entrar, lucía muy limpio, no
había rastro de desorden alguno, ciertamente Nishikido-Kun era muy ordenado,
pero como vive con Uchi, que es su extremo, por alguna razón Massu pensó
encontrar un departamento algo, menos prefecto, sin pensarlo dos veces y al
notar la ausencia de Uchi preguntó por el, Ryo bajó la cabeza y pretendiendo no
haber escuchado lo invitó a tomar asiento. Estaban uno frente al otro, entonces
el dueño de casa empezó a jugar con sus manos, como pensando bien lo que va
decir, lo cual, ciertamente es raro en el. “He terminado con Uchi” dice
suavemente como controlando el tono de su voz.
“Dicen
que cuando uno ama da todo de sí para que esa persona siempre tenga una sonrisa
en los labios, siempre me he preguntado por qué nunca he sido capaz de hacerlo
sonreír…” sonrió algo melancólico, trató de sonreír ante la mirada atónita de
Massu, quién se quedó sin palabras, el creía que ellos ya habían superado todos
los problemas, que finalmente serían felices, pero al parecer era algo serio.
Ryo apoyo sus manos en su cabeza y le contó que siempre tiene presente en su
memoria aquellas lagrimas que Uchi derramó por el. “Pero el te ama Ryo-chan…”
le dijo Massu tratando de salir de su asombro, eso era algo que nunca
comprendería, pero siempre pensó que no importa cuanto lo lastimen a uno,
cuando se ama eso es lo de menos, lo más importante es estar al lado de aquella
persona.
“Te
pasa lo mismo con Tegoshi, ¿Verdad?” una mueca extraña apareció en el rostro de
Ryo como si se tratara de una sonrisa, el otro chico se puso de todos los
colores, pero era algo demasiado obvio, así que solo afirmó con a cabeza. No
comprendía como el único que no se daba cuenta era Tegoshi, a veces solía
pensar que aún no había madurado, pero cuando lo observaba mirar a
Yamashita-kun con aquellos ojitos tan llenos de ilusión, se convencía de que ya
había crecido. Incluso después del beso
él simplemente fingió que no pasó nada, como le dolió esa reacción, Massu se
había perdido en sus sentimientos cuando notó que Ryo lo miraba como esperando
para poder hablar.
Massu
mordía sus labios algo nervioso, aún no entendía por que Ryo-chan lo había
llamado, aunque en parte se lo agradecía con todo su corazón, aquella situación
en el estudio era realmente incomoda, Tegoshi persiguiendo por todos lados a
Yamap, era algo demasiado terrible para él, simplemente no podía odiar a Yamap,
ciertamente lo quería mucho como para hacerlo.
Tomaron
una taza de café, conversaron de todo y de nada hasta que finalmente decidió
contarle lo que sucedía. Ryo respiró hondo y le contó que después de lo de
Ueda, Uchi se había vuelvo muy desconfiado y con toda razón. Pero que eso era
algo normal, durante mucho tiempo trató de hacer que su novio vuelva a tener
aquella confianza que perdieron cuando jugaron a ser infieles. Y justo cuando
ya había logrado que Uchi confíe en él, una vez más terminó lastimándolo. El
otro chico le preguntó qué era lo que había hecho, el bajo la cabeza, lucía
confundido, mordía sus labios y muy enojado dijo “Pasé la noche con otra
persona” el osito lo miró asombrado, no iba a preguntar de quien se trataba ya
que ese no era el caso.
Ryo
le contó lo sucedido con Ueda, algo que dejó en shock al otro, como era
posible, Massu sintió que la sangre le hervía, que ganas de golpear a Ryo, como
puede haberle hecho eso a Uchi y peor aún a Ueda que nada tenía que ver en todo
esto. Sus ojos se llenaron de reproche y quiso irse de ahí pero no pudo dejar
solo a Ryo, se veía muy mal.
Que
mal se sentía por su amigo, sobre todo por Uchi, debió haber llorado mucho al
ver aquello, pero Ueda, era el más afectado en toda esa situación, pensó en ir
a verlo luego y brindarle apoyo, de seguro se sentía destruido. Massu estaba
muy decepcionado de Ryo, nunca pensó que sería capaz de dejarse llevar así como
así, sabía lo mucho que ama a Uchi incluso más que a su vida, era algo que se
veía en sus ojos, en sus gestos, solía ser muy rudo con todos, pero cuando
estaba con Uchi se transformaba en otra persona. Pero esta vez creo que se
había pasado del límite. El más alto estaba muy preocupado por sus amigos, de
seguro Uchi lo terminaría perdonando también lo ama y mucho, pero esa relación
iba a estar marcada por un tercero, alguien que de seguro estaba sufriendo en
la oscuridad, conocía muy poco a Ueda pero sabía perfectamente que era alguien
muy sensible y si antes se veía afectado por las palabras de Ryo, ahora con sus
acciones debía estar peor.
“Necesito
que me ayudes a pedirle perdón a Ueda, a Uchi ya lo perdí…” dijo entre lagrimas
Ryo. Massu no sabía que pensar, iba a ser muy difícil, perdonar algo como eso,
¿Cómo hacerlo? Era un daño tan grande y tan complejo además de ser una
situación muy confusa. Massu se acercó a Ryo y le abrazo, quizás solo necesita
eso, el sabía que jamás lo iba a comprender, pero lo que el necesita en ese
momento era sentir que no estaba solo. Quizás consuelo.
Continuará…
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