Autor: Kainet
Titulo: Superhero (Secuela de FREEDOM)
Capitulo: 05 FINAL
Fandom: Super Junior, Miyavi
Parejas: Sichul / Michul
Clasificación: Angst / Au
Titulo: Superhero (Secuela de FREEDOM)
Capitulo: 05 FINAL
Fandom: Super Junior, Miyavi
Parejas: Sichul / Michul
Clasificación: Angst / Au
Advertencia: Si no te gusta el yaoi (Chico x Chico) es mejor que no leas este serial. No copies este fanfic, si deseas compartirlo en otro lugar, pide permiso al autor y coloca los créditos correspondientes.
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Track 5: Ai no uta
'Si pudieras pedir un solo deseo,
¿Qué pedirías ahora? Cuéntamelo despacio.'
'Si pudieras pedir un solo deseo,
¿Qué pedirías ahora? Cuéntamelo despacio.'
Despacio.
Lento. Silencioso. Un suspiro y luego dos. Caricias. Tres suspiros y luego
cuatro. Besos. Cuatro suspiros y tu nombre. Ya no puedo volver atrás. Tú
corriste a mí como yo corrí por ti. No importa si no me amas. No importa si yo
le miento a mi familia. Decidimos ser egoístas. Encerrarnos en nuestros
caprichos y fingir que el mundo puede venirse abajo si así lo desea. Kim
Heechul, eres el mejor desastre que se pudo cruzar en mi camino. Susurro
palabras en japonés. Las debes saber de memoria. Ya es un año en este secreto
tan nuestro. En este cinismo tan cómodo. ¿Qué deseo anhela tu corazón esta
noche? Beso tu espalda, la delineo austeramente con las yemas de los dedos. Tu
piel de estremece al sentir las texturas tan vivas. Susurras mi nombre, besó el
final de tus hombros. Jalas mis manos, las entrelazas con las tuyas, ríes al
sentirme sobre ti. Río al besar tu ombligo. Jalas de mi cuello, pides un beso
de forma caprichosa. Muerdo mis labios negándome a hacerte caso. Jugando a
torturarte.
Para cuándo me di cuenta, estabas casado y tenías una hermosa hija llamada Lovely. Para cuándo me di cuenta te separaba de ella de la forma más egoísta imaginada. Yo huí y me refugie en tus cálidas noches. Yo huí de Siwon. Me perdí en sus medicinas y su incapacidad por recordarme. Lo amo, sí. Pero esa cómoda distancia y esa simple amistad me consumen. Necesito sentirme amado. Te necesito, Miyavi. Te necesito y necesito que me necesites. Tus manos juegan con mi piel, muerdes despacio mis hombros, te pido un beso y juegas a no querer. Me tiro hacia atrás y cierro los ojos para sentir tus labios apoderarse de mi intimidad. Cierro los ojos, suelto susurros borrosos y poco comprensibles. Me gusta cómo me tratas. Me gusta quererte y me gusta que me quieras. Sé que volver a ser amantes la lastima a ella y ahora separa a una niña de su padre. Pero tan sólo un poco más quiero sentirme parte de alguien.
Para cuándo me di cuenta, estabas casado y tenías una hermosa hija llamada Lovely. Para cuándo me di cuenta te separaba de ella de la forma más egoísta imaginada. Yo huí y me refugie en tus cálidas noches. Yo huí de Siwon. Me perdí en sus medicinas y su incapacidad por recordarme. Lo amo, sí. Pero esa cómoda distancia y esa simple amistad me consumen. Necesito sentirme amado. Te necesito, Miyavi. Te necesito y necesito que me necesites. Tus manos juegan con mi piel, muerdes despacio mis hombros, te pido un beso y juegas a no querer. Me tiro hacia atrás y cierro los ojos para sentir tus labios apoderarse de mi intimidad. Cierro los ojos, suelto susurros borrosos y poco comprensibles. Me gusta cómo me tratas. Me gusta quererte y me gusta que me quieras. Sé que volver a ser amantes la lastima a ella y ahora separa a una niña de su padre. Pero tan sólo un poco más quiero sentirme parte de alguien.
-¿Gege?- pregunté con miedo al no lograr abrir la puerta. Desganado caminó a mi encuentro. Acabábamos de discutir sobre temas musicales y lo último que queríamos era seguir en el mismo sitio. Gege se acercó molesto, trato de jalar la perilla pero era inútil. Esa cosa no se abría.
-Lo has malogrado.- renegó, a lo que me miró de mala gana. Yo no hice nada. Sólo intenté salir primero. Lo miré de reojo. Se veía preocupado. Como sí mil cosas pasaran por su cabeza. ¿En qué pensabas Gege?- llama a alguien para que nos saque de aquí. Olvide mi celular en el auto.- ordenó caminando de vuelta a la sala para sentarse. Lo miré enojado. Odio que se ponga así de frío cuando estamos a solas. Mi celular estaba sin batería. Lo miré suplicante. Renegó al ver el aparato muerto. Levantó el teléfono que tenía al lado. Sus ojos se hicieron grandes- tampoco funciona la línea fija.- susurró a lo que toda la frialdad se le acabó. Se convirtió en ese niño grande e inocente de siempre.
-¿Qué hacemos Gege?
-Alguien vendrá. Seguro tu novio vendrá a buscarte. No nos queda más que esperar.
-Ya no estamos juntos, te lo había dicho.- me enojé. Lo miré directamente.- ¿Por qué tienes que salirme con algo así en este momento?
-Lo olvidé.
-¿No vas a preguntarme por qué terminamos?
-No
-Idiota...
-Respétame, mocoso- se violentó. Me asustó un poco, a lo que retrocedí dos pasos.- Ok. ¿Por qué?
-¿Por qué… qué?
-Terminaron...- se desesperó de nuevo, me pareció gracioso. Gege si supieras lo mucho que me gustas cuando bajas la guardia y vuelves a ser ese Gege que hace mucho conocí. ¿Por qué has cambiado tanto Gege?
-No lo tengo claro. Creo que se dio cuenta de que yo no puedo dejar de mirar a alguien que jamás volteará a verme.
-Ah...
-¿Esa es tu respuesta?
-¿Me has preguntado algo?
-Olvídalo.
-No. Explícate.
-Es obvio. Gege.
-Para mí no.
-Desde que entré hasta este preciso instante solo he mirado a una sola persona. Esa persona era cálida y cuidadosa conmigo pero luego se volvió más adulto. Más frío y hasta cruel conmigo.
-¿Kyu? Por lo de cruel...
-Que idiota eres, Gege. ¿En realidad no entiendes o no quieres entender?
-Un poco de ambos. - sonrió ante mi frustración. Sonrió de nuevo. Sonrió para mí. El corazón me dio un salto. Intenté declararme de nuevo pero mandó a guardar silencio. Me enojé y me aislé en un sofá. No quería ni mirarlo. Él sonreía y sonreía. Como sí le causara demasiada gracia mi repentino mal humor.
Giré sobre mi
cuerpo, quedaban quince minutos antes de salir de mi mentira para volver a mi
rutina de padre. Hace ya unos meses él me llamó. Su voz se quebraba y el
corazón lo tenía astillado. Sí, él eligió sacarme de su vida. Volver a esto y
meternos en este asfixiante laberinto sin retorno. Pero todos no equivocamos,
quiero creer esa mentira. Quiero creer que no le hago daño a Melody. Que ella cree
que cada fin de semana viajo a Corea por negocios. Quiero creer que ella no sabe
que mantengo una relación con Heechul. Sí. Me miento día a día. Me miento cada
vez que ella besa mis labios al despedirse un viernes y me saluda como si nada
un domingo con Lovely en los brazos.
'Aunque no pienses que este amor sea algo eterno,
miénteme sólo por ahora, intenta hacer que te crea con tus vagas palabras'
Estoy
enamorado de él. Duermo, luego despierto y luego duermo pero sigo enamorado de
él. Los dolores de cabeza los maquillo cada vez que puedo antes de salir a
trabajar. Las lágrimas y confusiones las olvido ni bien disparo en mi cabeza
con las siete píldoras diarias. Y aun así, sigo enamorado de él. Sí, estoy
enamorado de él, de Heechul. Su mirada me duele; su distancia, también. Los
tiempos me quedan cortos, siempre me prometo investigar sobre esa tan famosa
pareja llamada SiChul. No obstante, nunca puedo buscarnos. Le he contado a
Hangeng sobre lo que me pasa, él me sonríe de forma cálida, acaricia mi cabeza
y luego me pregunta si he recordado algo. ¿Por qué siempre me pregunta eso?
¿Hay algo que he olvidado? No lo entiendo. Cada fin de semana él desaparece, sé
dónde va, sé a quién va a ver. Me miento, me hao creer que solo se la pasa en
casa jugando videojuegos o alimentando a sus gatos. No quiero ni puedo aceptar
que él vaya a aquel departamento alejado en el que se encuentra con aquel
hombre casado. Y cada vez que él pronuncia mi nombre, cada vez que él deletrea
algún mensaje complejo mis sentidos se pierden. Incluso si es solo un complejo
saludo. Mi corazón salta alegre. Heechul, pronuncia una vez más ‘Siwonie’ por
favor. Día a día nos vemos, trabajamos juntos después de todo. Pero tú te ves
tan cómodo con esta distante amistad que no me animo a intentar conquistarte. Hoy
pasaste por mi lado. Hice una venia y seguiste tu camino. Me dueles. Intenté seguirte,
pero mi miedo a tu rechazo me hizo detenerme. Me detuve susurrando tu nombre. Me
detuve susurrando palabras que no puedo gritar.
-Me da pena.- se
cruzó de brazos Kyuhyun mientras miraba por la ventana.
-A mí me da rabia,
debería luchar.- renegó Kangin.
-No es tan simple…
declararse.- justificó Hangeng.
-Entre cobardes se
entienden, asumo.- bromeó Donghae a lo que Eunhyuk lo golpeó por el desatino.
El chino bajó la cabeza, muy frustrado, la escondió entre sus brazos.
-Deberías darle el
ejemplo a Siwon.- Intervino Yesung.- Aunque quizás sea mejor que SiChul nunca
vuelva a existir.
-Por el bien de la
salud mental de todos nosotros, a veces pienso que es lo mejor.- se apoyó
Ryeowook en el hombro de su novio. Los siete amigos sonrieron incómodos
observando a Siwon en el pasadizo, perdido en el rastro imaginario que había
dejado Heechul al pasar. Suspiraron al unísono como esperando que un milagro
los haga borrar todo y empezar de nuevo. A los minutos todos volvieron a su
actitud serena e iniciaron las actividades del día.
'Si resonara una canción de amor,
brillaría la luz en el cielo gris de la noche
Conectando una por una las luces,
alcanzaré el lejano lugar donde estás'
Tengo miedo de tu amor, Siwon. Sé que estás intentando acercarte. Sé que te sientes atraído hacia mí. Hangeng incluso me contó tu confesión. Pero no puede ser. Tú debes mantenerme en el olvido. Es definitivo. A veces llegas a los ensayos con girasoles, me los regalas y te miro indiferente. A veces compras mi comida favorita, sé que te han contado cuál es ya que por ti mismo no consigues recordarlo. Me duele, pero te rechazo. A veces buscar tocarme sobre el escenario y una vez más, al apagarse las luces, te alejo. Es enfermizo este amor nuestro. Ya no puede ser. Ya perdió su compás. Alguien me espera los fines de semana, por él, por ti y por mí, debes detener esto. Como yo debo detener mis latidos. Olvídame, por favor. Quiero que tu cabeza esté bien y si eso significa borrarme de tu vida, lo haré.
'Si pudiera pedir un solo deseo,
pediría verte, aunque fuera dentro de un sueño'
pediría verte, aunque fuera dentro de un sueño'
-Maldito bastardo.- fue lo único que ella dijo aquella tarde en la que juntos vimos las noticias. En la que la prensa japonesa sacó a la luz mi secreto mejor guardado. De alguna manera, se había enterado y lo estaban haciendo público. Todo se apagó en mi cerebro. Todo pasaba de forma lenta frente a mis ojos. Mi esposa histérica, mi hija llorando desde la habitación, la televisión repitiendo una y otra vez que yo engañaba a Melody con Heechul. Fotos de nosotros dos entrando en el departamento de Corea. Fotos desde fuera de esas cuatro paredes. La cara se me caía de la vergüenza, no sabía cómo mirar a mi esposa. Cómo tranquilizar a mi niña que lloraba ante el grito de mi madre y la consecuente cachetada en mi mejilla. Bajé la cabeza, caí sobre mis rodillas y le pedí perdón. Mordiendo mi orgullo. Pisando mis creencias, me arrodillé delante de ella. Era lo único que podía hacer. Quise dejarla, realmente quise hacerlo, pero no pude. El llanto de mi pequeña me perturbó. Los pies se me pegaron al suelo de aquella casa, no podía irme, menos ahora que sabía que un angelito más venía en camino. Me abracé a la cintura de mi esposa. Besé su vientre y le pedí perdón una infinidad de veces. No lo volvería a hacer. Ya no era un solo motivo el que me forzaba a ser padre. Eran dos pequeñas personas inocentes de todos mis errores. Aquella tarde, decidí terminar con Heechul.
'Si me enterara de que este amor se acerca a su final,
me quebraría como vidrio y nunca volvería a ser la misma, pero te amaría igual'
Sus
ojos están hinchados. Toma de mis manos, las besa lentamente sin pronunciar
palabra alguna. Sonríe un poco al notar mi desconcierto. Hoy, hoy Miyavi se ve
triste. Le pregunto qué sucede, no responde, se desespera en besarme. Lo beso
de vuelta y vuelvo a preguntar sobre sus labios. Me mira a los ojos, de forma
directa, sincera. ¿Tanto me amas Miyavi? Siento que me desnudas con la mirada. Siento
que lee el miedo en mi interior al entender que esta es la despedida
definitiva. Luego de esta noche nosotros seremos extraños. Con el sol naciente
nos separaremos para siempre. Quiero preguntar la razón, pero creo poder leerla
en su silencio. Lovely va a tener un hermano ¿Cierto? Después de todo eres tan
buen padre. Eso me enorgullece tanto. Mi querido Miyavi, has madurado tanto. No
pienso más. Dejo que él me arranque la ropa, rompe algo de piel al ser tan
apresurado. Como ahorrando minutos que luego podrá gastar sintiendo mi piel. Dicen
que la primera vez nunca se olvida, pero yo creo que la última se nos queda
debajo de la piel como un recordatorio de lo que pude haber sido, de que nunca
fue. Su boca me recorre, me acorrala, me enloquece. Hace unos días saltó a la
prensa esta relación. Él y su empresa lo negaron. Yo y la mía también. Fuimos unos
cínicos mentirosos de nuevo, pero no había otra forma de hacer las cosas. Luego
SM me prohibió volver a verlo. Los desobedecí una vez más. No me importó. Aquí estoy
en la despedida más silenciosa de mi vida. No te amo, Miyavi. Ambos lo tenemos
claro. Pero tampoco te odio. Eres ese respiro de oxígeno puro que siempre voy a
extrañar. Ese refugio secreto que siempre me va a faltar. Pero mi complicada
cabeza lo ha procesado. Ya no eres mío. Dos niños te alejan de mí y ya no puedo
seguir lastimando terceros. Araño tu espalda, la última herida en batalla, una
en la que Melody ha salido victoriosa. Araño tu espalda al sentirte en mi
interior, a mover mi cuerpo al compás del tuyo. Somos tan el uno del otro en
este momento que no controlo mis labios y te asfixio beso tras beso. Te quiero
mío, completamente mío. De forma egoísta te quiero mío, Miyavi Ishihara.
-Te gusto.- renegó Henry completamente ebrio en la puerta del departamento de Hangeng. El mayor lo miró con temor y al notar que se tambaleaba lo jaló del brazo antes de que haga alguna escena en el conjunto de viviendas.
-Duerme.
-Te
gusto. Me amas… y yo…- Henry buscó una caricia pero el mayor se alejó
rápidamente.
-Yo
quiero que te duermas. Estás demasiado ebrio.
-Te
gusto y yo te amo Gege…- lloró cayendo sobre sus rodillas a lo que Hangeng se
apresuró a levantarlo.- Te amo… ¡Maldita sea!
-Hablemos
más tarde.
-Más
tarde es demasiado tarde…
-Hablas
incoherencias.
-Incoherencia
es sentir lo que sentimos y vivir como vivimos…- Henry no esperó más y le clavo
un beso corto sobre los labios al otro, provocando que ambos pierdan el
equilibrio y caigan al suelo.- Intentémoslo…- susurró al sentir las manos del
otro apoderarse de su cintura.- Déjame hacerte feliz, Gege.
'No me importa que tengamos una relación incierta
Sé bueno conmigo como siempre lo eres
No digas la verdad,
que no soporto la idea de no verte más'
Aún te siento y ya te extraño Heechul. Eres tan inteligente que con una sola mirada ya sabes que hoy todo terminará. Que mañana volveremos a esa vida en la que nunca nos cruzamos alguna vez en un avión. Cual los rayos del sol salgan olvidaré las clases de coreano, olvidarás mis palabras en japonés. Nos olvidaremos y seguiremos respirando como si nunca hubiésemos sucedido. Como si esta historia nunca hubiese sido escrita. Es nuestra última noche. Nuestra última madrugada sintiendo la esencia del otro. Ya te extraño y aún seguimos aquí, abrazados el uno al otro. En esta cama ya se siente el frío de tu vacío. Pero nada puedo hacer. Ya no puedo ser egoísta. Dos pequeñas me esperan y por ellas daré lo mejor de mí. Por ti seré un padre ejemplar. Por ti porque si bien son mis hijas con Melody, tu eres su razón de ser. Adiós mi amado Heechul. Creo que por eso te amo tanto, eres el único ser que me hizo agachar la cabeza, morder el orgullo y decir: te amo.
Adiós,
Heechul.
'Mañana también será como siempre ha sido
Con la impresión de que podríamos volver atrás, miré al cielo
No me digas adiós
Y esta noche también caigo dormida'
Y te dejé ahí ni bien el sol empezó a entrar por la ventana. No sé si aún dormías o si pretendías hacerlo para evitar una despedida más larga. Solo sé que la última imagen de ti fue esa: alguien que dormía plácidamente en una cama. Como si no existiera un mañana. Sonreí antes de dejar de verte. Sonreí guardando celosamente esa última fotografía mental. A paso firme caminé hacia esa vida sin ti. Hacia ese día a día en el que la cómoda distancia con el ser que si amo me carcomerá día a día. A paso firme caminé hacia mi destino. Inminente y cruel, pero al fin y al cabo, mío.
Adiós
Miyavi, sé feliz.
'Si resonara una canción de amor,
brillaría la luz en el cielo gris de la noche
Conectando una por una las luces,
alcanzaré el lejano lugar donde estás'
Llegué a casa, tiré las llaves sobre la mesa y me senté en mi gran sofá, mis gatos se sentaron a mi lado para hacerme compañía. Los acaricié y luego dejé que mi cabeza caiga sobre el respaldar. ¿Cómo será a partir de ahora? ¿Vacío? ¿Frío? Una vida sin el amor de Miyavi. Una vida con un cercano y lejano Siwon. Por el bien de todos, así es como deben ser las cosas ¿Cierto? De alguna forma siento que al desprenderme de todo esto me ha hecho madurar. Soy más fuerte. Quizás sea la soledad. Mis gatos maúllan y me indican que alguien viene. Siempre adivinan la visita antes de que siquiera toquen el timbre. Miro la puerta fijamente, intento adivinar quién vendrá por mí. Quizás es Leeteuk. Quizás Donghae. Quizás Hangeng. ¿Quién será? A los minutos el timbre hace eco en todo el departamento. Camino desganado hacia la puerta, ni me fijo por el ojo mágico, abro la puerta sentenciado a fingir que estoy bien, después de todo, a partir de ahora así es como debe ser.
No esperé más. Han
sido días de días encerrado en mi cabeza. Encerrado en los recuerdos que uno a
uno golpearon todas mis ideas. Jalé de su cintura y le robé los labios. Sí, se
los robé. Mejor dicho, los recuperé. Así como recuperé todas mis memorias. El incidente
con Miyavi, esos errores que lastimaron mucho a Heechul, esa temporal locura
que invadió y esa estúpida amnesia que me mantuvo alejado de la única persona
que en verdad amo. Heechul, he venido a recuperarte. Ya me perdoné a mí mismo,
me toca hacer que tu corazón sane y que me perdones.
Siwon,
me has recordado, lo sé por tus texturas acaloradas y desesperación por
sentirme. ¿Qué sucederá de ahora en adelante? No lo sé, pero si algo he
aprendido es que no tengo las respuestas a todo. Solo tengo la fórmula correcta
para vivir y equivocarme. Solo eso tengo y al parecer tú también.
Fin.
N/A: Al fin pude terminar este track. Luego de dos años creo. Mil gracias por la espera. Espero que les haya gustado y que no me odien por la demora y/o el final mismo. Ya saben, los fragmentos entre comillas son la traducción de una canción que lleva el mismo nombre que el de este capítulo. 'Ai no uta' (canción de amor) de Koda Kumi.
Letra gracias a @Ichigonokokoro.blogspot.com
OMG! Nunca pensé que leería el final de este fanfic, creía que jamás lo continuarías & con ese pensamiento no volví a entrar, pero de repente quise leerlo de nuevo & me encontré con esto! Creo que estoy a punto de llorar jajajajajaja así que acabo de esta forma... ¡Me encanto! ¡Muchísimas gracias!
ResponderEliminarGracias a ti por leerlo, recordarlo y volver ;') sé que me ausenté mucho tiempo, pero no volverá a pasar.
ResponderEliminar:3
Lo termine jojo wiepfnoewnoifen Que bueno el final :B
ResponderEliminaral fin HanGeng y Henry terminaron juntos <3 xd
¿Como es que recién he podido leer esto?!!!!
ResponderEliminarPero bien dicen que más vale tarde que nunca. Y como lo he disfrutado de verdad.
He de ser sincera contigo, me perdí un poco con Siwon, yo pensé que Siwon no recordaría nada y Hee se quedaría cargando con la soledad. Porque en el penúltimo capitulo, no daba muestras de mejorar y recordar, por eso lo supuse. Entonces ahí como que me perdí un poco, porque al final siempre sí. El proceso no fue claro pero no sabes como te lo agradecí. Ya me estaba preparando para llorar con Hee en la soledad, de tener a un Siwon tan cerca y lejano a la vez, vienes y escribes esos últimos tres párrafos y me devuelves la alegría.
Yavi recupera la vista y es motivo para que Hee lo deje, porque regresaba a Seúl a "salvar" a Siwon. Yavi y yo sabíamos que se engañaba solo Hee, porque bien que seguía amando a Simba. Por eso regreso, para tener esa pequeña esperanza de una oportunidad con él.
Yavi se casa y hasta bebe tiene, eso si me impacto un poco, no pensé que terminara en su propia jaula. Pero eso que sus hijas eran producto del amor hacía Hee, si se lo creí. Porque por él fue que se entrego a los brazos de Melody, por olvidarlo a él y entonces todo tiene sentido.
Me quedaste debiendo SiChul (aquí habla mi vena SiChulosa, no me hagas caso kekekek) Pero esos relatos de entrega entre Yavi y Hee, los disfrute demasiado. Quien me entiende ¿verdad?
En fín, esta segunda parte supero lo que esperaba. Muchas gracias por escribirlo y compartirlo con todas nosotras. Por no dejarnos a la deriva con nuestros sentimientos en Freedom.
Gracias!!!
HeeChan