17 jul 2009

Fanfic Serial: Keipopu Sarada - Cap. 07

Autor: Kainet
Titulo: Keipopu Sarada / K-pop Salad (AKA Keipopu)
Capitulo: Capitulo 07
Fandom: Super Junior, THSK, TRAX
Parejas: Sichul / Kihae / Yewook / Yunjae / Yoosu / etc.
Clasificación: Angst / Au
Advertencia: Si no te gusta el yaoi (Chico x Chico) es mejor que no leas este serial. No copies este fanfic, si deseas compartirlo en otro lugar, pide permiso al autor y coloca los créditos correspondientes.


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Capitulo 7:

Un nuevo día llegó y los tenues rayos del sol empezaban a iluminar una habitación algo vacía en una esquina un joven abrazaba sus rodillas como si tuviera miedo de algo, como si le temiera a aquel nuevo día. Sus ojos hinchados dejaban al descubierto su tristeza, solía ser muy callado y nunca hablaba de sus problemas pero aquella noche la compañía de SungMin le había hecho mucho bien, hablar con el hasta que finalmente el chico rosa se quedó profundamente dormido había sido bueno y agradecía al cielo no estar tan solo. KiBum nunca se imagino que podría suceder aquello, los ojos del chico que amaba tenía tanta decepción, mordía de rato en rato sus labios como auto castigándose por el dolor que había causado. En un intento por ser silencioso y no despertar a aquel niño que dormía en el sillón, tropezó con su mesita de noche y calló al suelo, logrando despertar de un salto a SungMin. El chiquillo de labios rosas le sonrió e intentó animarlo, pero era más que obvio que estaba pasándola mal. Pronto sería el fin de ciclo y todos debían alistar sus presentaciones, SungMin tomó de la mano a su nuevo amigo cachetón y lo guió hasta la casa de Heechul, tendrían que hablar con todos para ver los últimos detalles. En Casa de Heechul estaba ya casi todos reunidos, Jae tenía una cara de sueño, ya que la noche anterior Micky lo había llamado en la madrugada y no paro de hablarle hasta la mañana siguiente; Junsu estaba muy distraído, sus ojos ya no irradiaban aquella luz de alegría que siempre lo caracterizaba, estaba como perdido en su mundo. Una vez que SungMin llegó con KiBum todos esperaban que lleguen la princesa y su asquito, pero como varias veces dijo Yesung, no había ni rastro de ellos.
Las horas pasaron y la idea de ir a la academia se deshizo por completo, YeSung les contó a los chicos del grupo de su primo que RyeoWook le había dicho que no cantaría con ellos. Todos como que se quedaron en shock, como era posible? Todos se preguntaban quien haría la parte de el chico frágil en su canción, estaban por entrar en pánico cuando la puerta se abrió dejando ver a un Heechul y un SiWon muy acaramelados, todos los miraron sorprendidos ante lo cual el rubio rápidamente se alejo de su novio. Corrió a ver a sus amigos al recordar su tarea, lo mismo que SiWon cuando vio a KiBum.

- QUÉ?!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!- gritó histérico el rubio cuando su primo le contó lo que había dicho su amigo- no!!! Yo te mato, cachetes!!! Te matooooooo!! Así mi maravillosa vida y futuro se arruinen, te mato!!- Junsu y SungMin lo agarraron para que no se le vaya encima a su primo, mientras SiWon lo miraba desde otro lado de aquella inmensa sala, lo miraba divertido, ciertamente adoraba a ese chico, cada centímetro de el, y ahora que le pertenecía nada podría opacar su felicidad.
- Chulis.... y si le decimos a Yunho que haga un rap en la parte de Wookie?- dijo SungMin mirando a Junsu, su novio le había contado lo sucedido con Micky así que ahora su meta era unir a YunHo con Jae, además se le hacían una linda pareja.- Jae incluso podría hacer un fondo para el rap de Yunho, que dices?- dijo mientras jugaba con sus manos
- Ay! Sungminie querido, que idea tan genial has tenido, además...- miró a Jae que estaba rojo de pies a cabeza- mi hermanito no tiene grupo, iba a bailar solito, claro que no le cuesta nada, por que como todos saben! Yunho baila como todo un dios, obvio! Aprendió de mi... bueno cof cof- el rubio sabía que si Micky y Yunho escuchaban decir eso se reirían en su cara toda una eternidad y quizás un poco más, el baile definitivamente no era algo que le guste hacer mucho.- bueno... –el rubio sacó su celular y llamó a su amigo que estaba en clases, después de prácticamente obligarlo a volarse las clases consiguió que Yunho acepte, unas cuantas frases en francés que solo YeSung comprendió habían logrado convencer al chico del baile sexy.

Pasó una media hora y Yunho estaba en la casa de HeeChul, pero no llegó solo Micky lo acompañó, ni bien vio a su presa corrió a preguntarle si su cita seguía en pie, Jae le sonrió y asintió con la cabeza. Junsu los observaba en silencio, sus ojos se encontraron con los de Yoochun y este ultimo pudo sentir cierto reproche en aquella mirada, pero no comprendió el porque, luego de mirarlo durante unos segundos recordó la escena del baño, ciertamente no dejaba de pensar en la toalla de Junsu y menos en aquella bonitas piernas que tenía y otros atributos más que había podido ver aquella vez. Tragó saliva y se enfocó de nuevo en su Jae, le sonrió y se hizo a un lado para que empiece a ensayar con su amigo, sin despegar la mirada del ex-nerd. Junsu daba vueltas por todos lados, intentando controlar sus celos, no comprendía el porque le afectaba tanto, sin querer se chocó con Typhoon que llegaba de la calle, conversaron un poco y el chico de negro le contó que se había quedado encerrado en un elevador con Rose hasta el día siguiente y que recién salía, Junsu lo miró asustado, se veía bien cansado pero sobre todo algo triste, le preguntó si estaba bien pero el chico de negro solo le contestó que necesitaba dormir.

En los primeros ensayos ni Jae ni Yunho se miraban eran como dos paredes de hielo, parecían dos desconocidos de no ser por el intenso rubor en las mejillas de ambos, el cual dejaba al descubierto que se gustaba, podría llegar a pensarse que se odiaban. SungMin miraba atento los movimientos de el mejor amigo de su novio, le preocupaba, la felicidad de Junsu también era la felicidad de Eun y la felicidad de Eun era su felicidad, necesitaba hacer algo, pero no tenía idea de que. De repente Micky pudo observar en los ojos de su amigo aquello que no veía desde que ambos se enamoraron de Heechul, aquella tristeza de tener que pelear con un amigo por otra persona, sintió que le dolía el pecho, aquella mirada en Yunho le lastimaba mucho, además aquella mirada también la tuvo cuando ellos dos decidieron dar por terminada su relación amorosa para simplemente seguir siendo amigos. Ambas situaciones las había decidido Micky, y siempre salía lastimado Yunho, esta vez también pelearía por Jae? Miró atentamente a su querido amigo descubriendo aquel rostro de una derrota sin antes siguiera intentar pelear, descubrió que Yunho le estaba cediendo el paso con Jae, sonrió de lado, tanto quería a aquel chiquillo para estar así? Ciertamente en pensaba en Jae con un solo objetivo: acostarse con el, al igual que con sus demás amantes. Se cruzo de brazos esperando descubrir más pero sin querer había retrocedido hasta quedarse en una esquina algo oscura, donde los rayos del sol no descubrieran sus felinos y analíticos ojos, por qué Yunho era tan tonto? Pero el no le dejaría el camino libre a alguien que ni siquiera estaba dispuesto a luchar, Jae sería suyo y no importaba más. De repente sintió que alguien estaba detrás de el, mejor dicho entre el y la pared un susurro con forma de “ouch” llamó su atención, sin querer había acorralado a Junsu entre la pared y su espalda y una vez que volteó a ver el espacio entre ambos disminuyó, las mejillas del más bajo se encendieron, tornando su blanca piel de un tono escarlata. YooChun sonrió al notar esto y por alguna extraña razón su cuerpo reaccionó antes que su cerebro y se acercó al oído del pequeño susurrándole al oído “esas mejillas rojas son por mí?” Junsu tragó saliva pero no pudo evitar sentir que se desmayaría, la suave y varonil de Micky era demasiado sexy. No contestó nada y bajó el rostro, no quería que juegue con el, o quizás si quería pero lo que no quería era ser lastimado, el no pensaba en Micky para pasar una noche, sino todas las noches de su vida. Al notar aquella incomodidad en el delfín Yoochun se alejó y le pidió disculpas y cuando estaba por irse Junsu le tomó de la mano, deteniéndolo de su retirada y jalándolo hacia a el lentamente.

Quería llorar, pero de seguro era un momento que no se repetiría nunca, iba a salir lastimado, eso lo sabía, pero si tan solo una vez Micky lo rodeaba con sus brazos, quizás podría vivir pensando que lo había amado, al menos en aquel momento. “vamos a mi casa...” le dijo jalándolo fuera de aquel lugar, solo SungMin y Heechul pudieron alcanzar a verlos, lo cual desconcertó a ambos. El rubio sabía perfectamente a qué lo llevaba, lo conocía tan bien, quiso detenerlos, pues sabía que alguien lloraría mucho después y no necesariamente sería el más alto. Había visto muchas veces a Micky destruir corazones, y seguir como si nada importase, vio como destruyó el corazón de aquel amigo que ahora sufría por no poder amar a Jae, lo había visto llorar tanto después de que simplemente el chico de los sombreros lo utilizó para olvidarse del rechazo de la princesa. Caminó entre los demás chicos que practicaban y dijo que Junsu había tenido que irse pero que el ya sabía su parte, que al día siguiente lo haría perfecto. Pasó por el lado de su novio y se apoderó de su cintura, haciéndole pequeñas cosquillas en el estomago, SiWon le sonrió y beso su cuello, todos se quedaron de una pieza cuando los vieron hacer eso, YunHo buscó con la mirada a Micky para afirmar sus sospechas, ambos sospechaban que algo sucedía y al parecer ya había sucedido, pero el no encontrar la mirada de Chunnie giró para ver de nuevo a Cinderella con su novio, encontrándose con aquellos profundos ojos de Jae, que lo analizaban de pies a cabeza, como intentando resolver una preguntar sin respuesta, como intentando comprender por si solo lo sucedido en la fiesta y el cambio repentino de actitud. Ni todos los libros que había leído le enseñaban como curar aquel dolor que sentía cuan Yunho era frío y lo ignoraba.

- ay asquitO! Que meloso eres!!! –gritó el rubio haciendo que las miradas de Jae y Yunho se desconecten- cierto...- mirando a todos que los miraban sorprendidos- uhm... diles pues...- besando la comisura del labio de SiWon
- yo?... uhm...- SiWon se puso rojo de pies a cabeza, hasta empezó a temblar, por alguna razón toda su tranquilidad se desvanecía cuando esa princesa estaba cerca- pues...
- lento asquito... muy lento... buenO! Lo digo yo... escuchen bien, si?- haciendo mil y un gestos sin soltar a su asquito- hermanito...-mirando a Yunho- ya tienes cuñado... es decir... esta hermosa princesa.... osea yo... ya tiene príncipe.... lo tocan, lo miran, le hacen algo impropio y toda mi furia caerá sobre ustedes, ENTENDIDO?- cambiando su tono gracioso de voz a uno agresivo al advertirles lo que le pertenecía.

Todos se echaron a reír como locos, Yunho le sonrió a su princesa y luego le abrazo para felicitarle, los ensayos continuaron y como que se alivió un poco la tensión, YeSung miraba atento la hora de su reloj, quería que sea hora de ir a visitar de nuevo a RyeoWook, por alguna razón quería estar a su lado, quizás es que en verdad quería que lo perdone. La noche anterior había recordado algo pero no mucho solo que le había gritado, pero no recordaba que le había gritado solo el luego de eso el chico frágil salió llorando de la fiesta.

Eran días fríos pero el calor iba aumentando en el auto de Micky, Junsu le dijo que sus padres no estarían en casa y que su hermano estudiaba en la universidad y no llegaba hasta tarde, podrían tener la casa para ellos dos, sabía que eso era lo único que buscaba el chico del sombrero pero quería demostrarle lo mucho que lo amaba, si a Micky le nacía en ese momento acorralarlo entonces lo dejaría hacer lo que quisiera con el. Ni bien entraron en la casa Micky acorralo a Junsu contra la pared y empezó a besar su cuello, este solo se quedó estático sin saber que hacer, solo dejaría que su Chunnie haga lo que quisiera con el. Luego de devorar su cuello sus manos se deslizaron hasta la espalda del delfín descendiendo lentamente hasta llegar a aquella parte tan bien proporcionada que tenía el pequeño. Este solo soltó un suspiro algo agitado al sentir las manos de Micky recorrer su cuerpo de esa manera, lo detuvo un rato y le guió hasta su cuarto, una vez en la puerta Micky lo acorraló de nuevo, ciertamente desde que lo vio en el baño no había dejado de pensar en hacerle de todo, pero verlo tan inocente lo hacía sentirse como decía Yunho, un pedófilo. Le robó un cortó beso de los labios y prácticamente entraron a la habitación deshaciéndose de toda la ropa, pero cuando Micky alzo la mirada para ver donde estaba la cama se encontró con una habitación tan infantil en lugar de excitarlo le bajo la calentura con tanta ternura, ese niño que tenía en frente debía quererlo en verdad a entregarse así sin saber nada, ya que con tan solo observar aquellos carritos de juguetes en el suelo y todos los videojuegos se podría ver que no tenía experiencia alguna. Normalmente eso no hubiera sido impedimento alguno para el y continuaría aprovechándose del inocente pero algo dentro de el lo detuvo, se separó del pequeño y acaricio su cabeza sonriéndole, le tomó de las manos y se las beso, luego le acomodo la camisa que por poco y se la arranca minutos atrás, el se colocó el polo que había dejado tirado en la puerta y empezó a abotonarse de nuevo el pantalón. El pequeño lo miraba desconcertado, YooChun se sentó en su cama y se dejó caer en ella, suspirando, Junsu jugaba con sus manos esperando alguna respuesta pero el otro parecía ido.

- lo lamento... no puedo...- dijo Micky casi en un susurro, Junsu sintió que se le venía el mundo abajo, por qué lo rechazaba de esa manera, todo lo que le había costado armarse de valor todo lo que estaba dispuesto a sacrificar tan solo por sentirse amado al menos unos minutos por el- lo lamento en verdad... yo...
- no te preocupes... – dijo conteniendo las lagrimas- yo sé a lo que veníamos, no buscaba que tu quieras formalizar este encuentro... no te detengas por eso...
- .......... – micky lo miró en silencio, acaso lo decía en serio? Estaba dispuesto a dejarse romper el corazón solo por unos minutos con el?- no es por eso...- tomó de las manos de nuevo a Junsu y las besó- eres tan tierno... algo diferente pasa conmigo cuando tu estas... no tengo idea que es pero sé que si me acuesto contigo en este momento.... yo...
- va a cambiar? .... estoy harto de solo ser el tierno... que no ves que me gustas mucho?- ante aquella confesión Junsu bajó la cabeza en signo de vergüenza- mucho... mucho... estoy dispuesto a darte mi cuerpo si tan solo me miras a mi unos minutos... sé que Jae te interesa... se que no soy lo suficientemente bueno para ti... pero déjame creer que al menos unos minutos tu me quisiste como yo a ti...
- nunca vuelvas a decir eso... tu eres demasiado bueno para mi, ese es el problema... yo... tengo miedo de terminar enamorándome de ti...- dijo Chunnie mientras se paraba y besaba su frente- cuando yo sea una mejor persona... voy a venir por ti...

Micky caminó hasta su auto, no podía creer lo que había dicho, pero después de todo y por más que lo negaba, era cierto, Junsu también le gustaba pero de una manera tan especial que superaba cualquier calentura que tuviera, y quizás por eso lo alejaba de el, no quería enamorarse, eso dolía ya se había enamorado y dolió demasiado como para volver a hacerlo. Manejó durante una hora, sin sentido, hasta que finalmente recordó que debía ir por unos papeles las inscripciones para la academia empezarían pronto, aunque faltaban tres meses era mejor apresurarse para no quedarse sin cupo. Dio vuelta en u y se dirigió hasta su departamento, al abrir la puerta vio un bulto en su sofá, lentamente se acercó para observar de cera a quienes estaban ahí y cuando estaba por poder ver los rostro un rostro muy familiar para el lo encaro, si, el peor castigo de dios estaba frente a el, con una enorme sonrisa, si había algo que ponía en crisis a Micky era aquel ser que lo miraba pícaramente. Era su hermano menor, Ricky. Sus felinos ojos se desviaron para descubrir a otro muchacho en el sofá, casi igual o menos tapado que su hermano, pero al verlo bien casi se desmaya, era Yunho, el hermano de Junsu, como era posible que ese tipo estuviera ahí si el pequeño decía que estaba en la universidad y peor aún que hacía con tan poca ropa en SU sofá con su hermano.

- qué haces tu aquí?- preguntó desafiante el hermano del delfín
- no! Qué haces tu aquí?!?!??! En MI departamento y tu?!?!?! Tu... pequeño demonioooooooooooo que no deberías estar en USA?!?!?! A que has venido u_u? No pienso alimentarte si has peleado con papá...
- he venido a cuidarte... papá dijo que eres un promiscuo violador y que debo enseñarte mi sentido ético jajajaja si supiera que sus dos hijos somos... bueno tu sabes... que ambos cojeamos con el mismo pie jajajajaja ahora vuelve por donde viniste y déjame terminar mis asuntos con mi novio, estamos?
- Pervertido! En mi sofá no! T___T no vas a decirle nada a papá de lo que hago o dejo de hacer aquí?
- Si... pero déjame estar aquí sin restricciones...
- T__T vuelvo en la noche...- dijo cerrando la puerta y volviendo a irse por donde había llegado, la peor pesadillas de YooChun estaba en Corea del Sur y no había indicios de que se fuera pronto. Cerró fuertemente los ojos mientras se apoyaba en el espejo del elevador que lo devolvía hasta su auto, por qué Ricky tenía que estar de novio con Yunho, ese estúpido niño que lo miraba mal, por alguna razón si alguna vez decidía ser novio de Junsu, sería muy difícil de tratar a aquel cuñado y aún así no estuviera de novio con Junsu, de todas maneras ese tipo sería su cuñado, estaba convencido de que su vida empezaría a ser un caos a partir de aquel día.

La noche se intensificaba en todo Corea y Jae continuaba practicando aquella parte con Yunho, ya casi todos se habían ido solo quedaban Heechul, SiWon y ellos dos, el rubio les pidió que descansen mientras se apoderaba de al gran piano de su ala, cerró los ojos y empezó a tocar una suave melodía a lo que Jae empezó a acompañarlo con su hermosa voz, el color de su voz era tan especial que hacía estremecer a cualquiera con tan solo escucharlo. Cuando la melodía llegó a su fin SiWon caminó lento hasta su princesa y rodeó su cintura con sus brazos, el rubio llevó sus manos a las mejillas del mas alto y las acaricio, se veían como una pareja que se había amado desde hace ya mucho, y tan solo tenían dos días juntos, Heechul le robó un suave beso de los labios a su novio y luego escondió su rostro en su cuello, tan solo para sentir las caricias del otro. U-know los miraba feliz, era el primer novio de Heechul y sabía que SiWon nunca lastimaría a la princesa así, se sentía bien, sonrió melancólico al sentir la mirada de Jae clavada en el, pero pretendió ignorarlo, por otro lado el ex nerd era tan tímido que por más que moría por tener una explicación no se atrevía a preguntar sobre lo sucedido.

Las luces ya estaban encendidas en aquella fría habitación, si algo le llamaba la atención de aquel lugar era la soledad de aquel chiquillo que siempre sonreía, o al menos eso pensaba ya que cada vez que YeSung pensaba en Ryeo lo recordaba sonriente, bueno no todas, últimamente recordaba ciertas imágenes de la fiesta, pero a aparte de aquella situación, siempre lo miraba sonriente, como alguien que estaba tan solo podía ser tan feliz? El siempre había sido muy reservado y callado, solo cuando Heechul estaba cerca era de hablar con otras personas, pero nunca era así de alegre y el también estaba acostumbrado a estar solo en su gran casa, quizás por aquella soledad fue que se volvió así. Quizás aquella soledad lo llevó a crear a mr. Shadow, quizás aquello lo llevó a enamorarse de el.

Continuará...

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